Seis consejos para la mejor recuperación posible del ataque o derrame cerebral

Un ataque o derrame cerebral puede cambiar tu vida en un instante. Es una de las causas más frecuentes de discapacidad y la quinta causa principal de muerte en EE. UU.

Es posible que la recuperación sea un largo proceso de reaprendizaje de casi todo: desde hablar, leer y caminar hasta cómo comer de manera independiente. Empezar el programa de rehabilitación adecuado lo antes posible puede ayudar a los sobrevivientes a recuperarse mejor.

Según Pamela Duncan, Ph.D., FAHA, voluntaria de la American Stroke Association (Asociación Americana del Derrame Cerebral) y profesora de neurología en Wake Forest Baptist Health de Winston-Salem, Carolina del Norte, “el impacto que perdura de un ataque o derrame cerebral puede variar mucho de un paciente a otro en cuestiones de déficit y gravedad”. Además, mencionó que “es fundamental contar con un programa de rehabilitación diseñado para ti, donde lo necesites, ya sea en un hospital o en casa”.

La iniciativa Together to End Stroke (Juntos para acabar con el ataque o derrame cerebral) de la American Stroke Association (Asociación Americana del Derrame Cerebral), con el patrocinio a nivel nacional de los Servicios de Rehabilitación del Hospital Kindred, ofrece estos seis consejos de recuperación para los sobrevivientes de un ataque o derrame cerebral y sus cuidadores:

  1. Pídele a tu médico que evalúe las dificultades físicas y cognitivas que tengas después de sufrir un ataque o derrame cerebral y que te proporcione un plan específico con el fin de abordar cada una de ellas.
  2. Consulta con tu médico para crear un plan para controlar tu riesgo de sufrir otro ataque o derrame cerebral. Esto puede incluir realizar más actividad física, dejar de fumar y controlar la presión arterial.
  3. Empieza tu programa de rehabilitación personalizado tan pronto como tu equipo médico te dé la autorización. La rehabilitación temprana es importante. La recuperación puede llevar años, pero el progreso más rápido suele producirse durante los tres primeros meses después de un ataque o derrame cerebral.
  4. Pregunta a tu equipo médico cuáles son las mejores opciones de rehabilitación para ti a nivel local. En las pautas de la American Heart Association (Asociación Americana del Corazón), se recomienda la rehabilitación hospitalaria a los pacientes que cumplan con los requisitos para ello. Sin embargo, la rehabilitación puede tener éxito en cualquier lugar, desde un centro de rehabilitación formal hasta la comodidad de tu propio hogar.
  5. Habla con los profesionales de la salud sobre cualquier problema financiero, como la posibilidad de pagar los medicamentos. Pueden ayudarte a elaborar un plan e identificar los recursos para la comunidad.
  6. Realiza un seguimiento periódico con los profesionales de la salud. Es posible que algunas dificultades, como recordar tomar los medicamentos, no queden claras de inmediato.