Tipos de medicamentos para la presión arterial

Hay muchos tipos de medicamentos para la presión arterial

Hay muchos medicamentos para la presión arterial, conocidos como antihipertensivos, disponibles mediante prescripción para reducir la hipertensión arterial (HTA o hipertensión). Existen diversas clases de medicamentos para la hipertensión arterial e incluyen diferentes fármacos.

Descripción general de los tipos de medicamentos para la presión arterial

Aquí se proporcionan resúmenes de algunos de los tipos de medicamentos cardiovasculares recetados más importantes.

• Para su información y como referencia, hemos incluido nombres genéricos, así como nombres de marcas (marcados con un *) que la ayudarán a identificar lo que está tomando. Sin embargo, esta información no implica una recomendación o aprobación de la American Heart Association.
• Si su prescripción de medicación no está en esta lista, recuerde que su profesional de la salud o farmacéutico es la mejor fuente de información a la que consultar.
• Es importante que informe a su médico sobre todos los fármacos que toma y que comprenda los efectos deseados y los posibles efectos secundarios.
• Nunca deje de tomar un medicamento ni cambie la dosis o frecuencia sin consultar previamente a su médico.

Los pacientes que toman i-ECA y ARA que contraen la COVID-19 deben continuar con el tratamiento, a menos que su médico les indique lo contrario.

Entre los tipos de medicamentos para la presión arterial se incluyen:

• Diuréticos
• Betabloqueantes
• Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina
• Antagonistas de los receptores de la angiotensina II
• Bloqueadores de canales de calcio
• Alfa bloqueantes
• Agonistas de los receptores alfa 2
• Fármacos alfa y beta bloqueantes combinados
• Agonistas centrales
• Inhibidores adrenérgicos periféricos
• Vasodilatadores

Diuréticos

Los diuréticos ayudan al organismo a deshacerse del exceso de sodio (sal) y agua, y ayudan a controlar la presión arterial. A menudo se utilizan en combinación con tratamientos prescritos adicionales.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los diuréticos son:

• Algunos de estos fármacos pueden reducir el aporte de potasio mineral a su organismo. Pueden aparecer síntomas como debilidad, calambres en las piernas o cansancio. Comer alimentos con potasio puede ayudar a prevenir una pérdida significativa de potasio. Si su médico lo recomienda, puede evitar la pérdida de potasio tomando un líquido o comprimido con potasio junto con el diurético. Los diuréticos como la amilorida (Midamar)*, la espironolactona (Aldactone)* o el triamtereno (Dyrenium)* se denominan fármacos “ahorradores de potasio”, ya que no hacen que el cuerpo pierda potasio. Pueden recetarse por sí solos, pero normalmente se utilizan con otro diurético. Algunas de estas combinaciones son Aldactazide*, Dyazida*, Maxzide* o Moduretic*.
• Algunas personas sufren ataques de gota después de un tratamiento prolongado con diuréticos. Este efecto secundario no es común y puede tratarse con otro tratamiento.
• Las personas con diabetes pueden notar que los fármacos diuréticos aumentan su nivel de azúcar en sangre. Un cambio en la medicación, la dieta, la insulina o la dosis antidiabética oral lo corrige en la mayoría de los casos.
• Puede producir impotencia.

Betabloqueantes

Los betabloqueantes reducen la frecuencia cardíaca, la carga de trabajo del corazón y la salida de sangre del corazón, lo que reduce la presión arterial.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los betabloqueantes son:

• Insomnio
• Manos y pies fríos
• Cansancio o depresión
• Ritmo cardíaco lento
• Síntomas de asma
• También puede producir impotencia
• Si tiene diabetes y está tomando insulina, vigile de cerca su respuesta al tratamiento.
• Si le han recetado betabloqueantes, consulte a su profesional de la salud si está pensando en quedarse embarazada o si existe la posibilidad de quedarse embarazada. Si descubre que está embarazada, consulte a su médico lo antes posible para determinar la medicación más segura para usted en este momento.

Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina

La angiotensina es un componente químico que hace que las arterias se estrechen, especialmente en los riñones, pero también en todo el cuerpo. ECA significa enzima convertidora de angiotensina. Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina ayudan al cuerpo a producir menos angiotensina, lo que ayuda a que los vasos sanguíneos se relajen y se dilaten, lo que a su vez reduce la presión arterial.

Algunos de los posibles efectos secundarios de dichos inhibidores son:

• Erupción cutánea
• Pérdida de sabor
• Tos seca y persistente crónica
• En raras ocasiones, daño renal
• Las mujeres que toman inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina o un ARA para la hipertensión arterial no deben quedarse embarazadas durante el tratamiento. Si está tomando un inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina o un ARA y cree que puede estar embarazada, consulte a su médico inmediatamente. Se ha demostrado que estos fármacos son peligrosos tanto para la madre como para el bebé durante el embarazo. Pueden causar presión arterial baja, insuficiencia renal grave, exceso de potasio (hiperpotasemia) e incluso la muerte del bebé.

Antagonistas de los receptores de la angiotensina II

Estos fármacos bloquean los efectos de la angiotensina, un componente químico que hace que las arterias se estrechen. La angiotensina necesita un receptor, como una “pieza” química que encaja o se une con otro elemento, para contraer el vaso sanguíneo. Los antagonistas de los receptores de la angiotensina (ARA) bloquean los receptores, de modo que la angiotensina no puede estrechar el vaso sanguíneo. Esto significa que los vasos sanguíneos permanecen abiertos y se reduce la presión arterial.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los antagonistas de los receptores de la angiotensina II son:

• Puede provocar mareos ocasionales.
• No se deben utilizar ARA durante el embarazo. Los medicamentos que actúan directamente sobre el sistema renina-angiotensina pueden causar lesiones o incluso la muerte del feto en desarrollo. Cuando se detecta el embarazo, se debe consultar al profesional de la salud lo antes posible.

Bloqueadores de canales de calcio

Este fármaco evita que el calcio entre en las células del músculo liso del corazón y las arterias. Cuando el calcio entra en estas células, provoca una contracción más intensa y fuerte por lo que, al disminuir el calcio, la contracción del corazón no es tan forzada. Los calcio-antagonistas relajan y abren vasos sanguíneos estrechados, además de reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los calcio-antagonistas son:

• Palpitaciones
• Tobillos hinchados
• Estreñimiento
• Cefalea
• Mareos

Alfa bloqueantes

Estos fármacos reducen la resistencia de las arterias y relajan el tono muscular de las paredes vasculares.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los alfa bloqueantes son:

• Frecuencia cardíaca rápida
• Mareos
• Descenso de la presión arterial al levantarse

Agonistas de los receptores alfa 2

Estos fármacos reducen la presión arterial disminuyendo la actividad de la parte simpática (productora de adrenalina) del sistema nervioso involuntario. La metildopa se considera un tratamiento antihipertensivo de primera línea durante el embarazo porque los efectos adversos no son frecuentes para la mujer embarazada ni el feto en desarrollo.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los agonistas de los receptores alfa 2:

• La metildopa puede provocar somnolencia o mareo

Fármacos alfa y beta bloqueantes combinados

Los fármacos alfa y beta bloqueantes combinados se administran mediante goteo por vía IV a los pacientes que sufren una crisis hipertensiva. Pueden prescribirse para uso ambulatorio en pacientes con hipertensión arterial que tengan riesgo de sufrir una insuficiencia cardíaca.

Posible efecto secundario observado en los fármacos alfa y beta bloqueantes combinados:

• Pueden provocar un descenso de la presión arterial al levantarse

Agonistas centrales

Los agonistas centrales también ayudan a reducir la capacidad de los vasos sanguíneos de tensarse o contraerse. Los agonistas centrales siguen una vía nerviosa diferente a la de los alfa y betabloqueantes, pero logran el mismo objetivo de reducción de la presión arterial.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los agonistas centrales son:

• La alfametildopa (Aldomet)* puede producir una caída mayor de la presión arterial cuando se encuentra en posición vertical (de pie o caminando), y puede hacer que se sienta débil o mareada si la presión ha bajado demasiado. Este fármaco también puede causar somnolencia, cansancio, sequedad bucal, fiebre o anemia. Los pacientes masculinos pueden experimentar impotencia. Si este efecto secundario persiste, es posible que su médico tenga que cambiar la dosis del fármaco o utilizar otro medicamento.
• La clonidina (Catapres)*, el guanabenz (Wytensin)* o la guanfacina (Tenex)* pueden producir una sequedad grave de la boca, estreñimiento o somnolencia. Si está tomando alguno de estos fármacos, no lo deje repentinamente porque la presión arterial puede aumentar muy rápido hasta niveles peligrosamente altos.

Inhibidores adrenérgicos periféricos

Estos medicamentos reducen la presión arterial bloqueando los neurotransmisores del cerebro. Esto impide que los músculos lisos reciban el “mensaje” para contraerse. Estos fármacos se utilizan muy pocas veces, a no ser que los otros medicamentos no ayuden.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los inhibidores adrenérgicos periféricos son:

• La reserpina puede causar congestión nasal, diarrea o acidez estomacal. Estos efectos no son graves y no se requiere ningún tratamiento aparte de cambiar la dosis. Si tiene pesadillas, insomnio o se deprime, informe inmediatamente a su médico.
• El guanadrel (Hylorel)* o la guanetidina (Ismelina)* pueden causar diarrea, que puede ser persistente en algunas personas. Este efecto secundario suele ser menos problemático si continúa el tratamiento. Estos fármacos reducen más la presión arterial cuando se encuentra de pie. Por lo tanto, es posible que se sienta mareada, aturdida y débil cuando se levante de la cama por la mañana o se ponga de pie de repente. Si observa alguna de estas reacciones y persiste durante más de un minuto o dos, póngase en contacto con su médico. Puede indicarle que reduzca u omita la siguiente dosis de la medicación.
• Cuando tome guanetidina, no se ponga al sol ni asista a sitios con mucha gente si empieza a sentirse débil o mareada. Estas actividades provocan una baja de la presión arterial y desvanecimiento. Los pacientes masculinos pueden experimentar impotencia. Póngase en contacto con su médico si se produce alguno de estos efectos secundarios.

Dilatadores de los vasos sanguíneos (vasodilatadores)

Los dilatadores de vasos sanguíneos, o vasodilatadores, pueden provocar que el músculo de las paredes de los vasos sanguíneos (especialmente las arteriolas) se relaje, lo que permite que el vaso se dilate (ensanche). Esto permite que la sangre fluya mejor.

Algunos de los posibles efectos secundarios de los vasodilatadores son:

• La hidralazina (Apresoline)* puede causar cefalea, hinchazón alrededor de los ojos, palpitaciones cardíacas o molestias y dolores en las articulaciones. Normalmente, ninguno de estos síntomas es grave y la mayoría desaparecerá después de unas semanas de tratamiento. Este fármaco no suele utilizarse por sí solo.
• El minoxidil (Loniten)* es un fármaco potente que se utiliza normalmente solo en casos resistentes de hipertensión arterial grave. Puede provocar retención de líquidos (aumento importante de peso) o un crecimiento excesivo del vello.

† Se utiliza en casos graves o cuando hay insuficiencia renal.