Conozca a Kimberly Goodloe, representante Heart Valve Ambassador de la AHA
Ayudar a otros sobrevivientes de la enfermedad de la válvula cardíaca es terapéutico para Kimberly Goodloe.
“Me gusta alentar a otros sobrevivientes a que no pierdan la fe, a que se mantengan en contacto con la familia y los amigos, especialmente en los días en que necesitan apoyo”, afirmó la exgerenta de casos de servicios sociales y maestra suplente en el área suburbana de Atlanta.
Durante más de 10 años, Goodloe ha sido voluntaria para la American Heart Association, incluido el rol como representante de Heart Valve Ambassador los últimos cinco.
Su experiencia de salud incluye varias cirugías y una válvula cardíaca mecánica. Cuando descubrió, en la edad adulta, que había nacido con un defecto aórtico, luchó por afrontar la inesperada necesidad de un marcapasos después de las complicaciones derivadas de la cirugía de reemplazo de válvula.
Goodloe, que recientemente celebró el 11.° aniversario de su primera cirugía a corazón abierto, dijo que trabajar como representante de Heart Valve Ambassador le permite estar en contacto con muchos pacientes y expertos en medicina. Ella alienta a los pacientes a hacer un seguimiento sus síntomas, a desarrollar una buena relación con sus equipos de cuidado de la salud, a hacer preguntas y a encontrar a alguien que los escuche.
La experiencia también le ha enseñado la importancia de ser una defensora de sí misma y tener un sistema de apoyo sólido para los pacientes y los cuidadores.
“Es importante que los cuidadores dediquen tiempo a sí mismos y reciban ayuda y apoyo”, sostuvo. “Son parte de la curación y estamos todos juntos en esto”.
Debido a la pandemia del COVID-19, Goodloe ha animado a otros de forma virtual a través de foros como la Red de apoyo en línea de la American Heart Association.
“Vaya día a día y nunca, nunca pierda la esperanza”, recomendó. “Lo mejor está por venir”.