Contaminación del aire, cardiopatías y derrames cerebrales
Tanto si vive en una ciudad en la que los pronósticos de contaminación son rutinarios o en un lugar menos poblado, las diminutas partículas de contaminación del aire pueden provocar grandes problemas para el corazón.
La contaminación puede proceder del tráfico, las fábricas, la generación de energía, los incendios o incluso de las estufas de leña. Una de las fuentes más comunes en interiores es el tabaquismo, un peligro para la persona que fuma y para las personas que se encuentran cerca.
“Hay una gran variedad de cosas que flotan el aire. Algunas son naturales, otras no”, afirmó Russell Luepker, M.D., cardiólogo y profesor de Mayo en la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota. “Todos estamos expuestos, en cierta medida”.
Los efectos pueden ser inmediatos o a largo plazo
Los efectos graves de la contaminación del aire a corto plazo tienden a afectar más a personas mayores o que ya tienen una cardiopatía, afirmó el Dr. Luepker, que también es epidemiólogo.
Por ejemplo, alguien con aterosclerosis o acumulación de depósitos grasos en el revestimiento interior de las arterias experimenta inmediatamente problemas cuando los contaminantes intervienen en la ruptura de placa de un vaso sanguíneo, lo que provoca un ataque cardíaco.
“Esto los pone en una situación límite”, de acuerdo con el Dr. Luepker.
El Dr. Luepker también indicó que ciertos estudios han demostrado un aumento de las muertes y hospitalizaciones cuando hay altas concentraciones de humo en Los Ángeles, y las investigaciones indican que esto también ocurre de acuerdo con el Dr. Luepker.
También se cree que la contaminación tiene efectos inflamatorios en el corazón, lo que provoca problemas cardíacos crónicos.
Los investigadores médicos están especialmente preocupados por las partículas contaminantes inferiores a 2,5 micras, que normalmente están relacionadas con la quema de combustibles. Puesto que son tan diminutas, no son fáciles de detectar y entran más fácilmente en el cuerpo humano. A continuación, empiezan a irritar los pulmones y los vasos sanguíneos alrededor del corazón. Los datos sugieren que, con el tiempo, los contaminantes agravan o aumentan el proceso de enfermedad en las arterias.
La vida cotidiana y el trabajo pueden conllevar riesgos por contaminación
Aunque cualquiera puede estar expuesto, las personas que viven cerca de cruces o fábricas, o que dirigen el tráfico, se encuentran en una situación de riesgo particular, de acuerdo con el Dr. Luepker.
“Respirar estas partículas a todas horas ha aumentado los problemas”, comentó.
Son muchos los factores que contribuyen a desarrollar una cardiopatía, incluidos los genes. Sin embargo, el Dr. Luepker afirmó que la creciente evidencia médica asocia la contaminación del aire con las cardiopatías.
En 2004, la American Heart Association publicó una declaración científica en la que se concluyó que la exposición a la contaminación ambiental contribuye a las enfermedades cardiovasculares y a la mortalidad. En 2010, se elaboró un informe actualizado sobre esos riesgos.
Según la declaración, la exposición a corto plazo puede aumentar el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular, una arritmia e insuficiencia cardíaca en personas susceptibles, como ancianos o personas con situaciones clínicas preexistentes.
El riesgo de muerte es mayor a causa de la exposición a largo plazo. Según el panel científico que trabajó en la declaración, la ciencia actual sugiere que la contaminación del aire facilita el desarrollo y la progresión de la aterosclerosis. También puede desempeñar un papel importante en la hipertensión arterial, la insuficiencia cardíaca y la diabetes.
Tomar precauciones puede ayudar a los pacientes cardíacos y a otros
Hable con su médico sobre los riesgos de su zona, dónde encontrar más recursos sobre la contaminación ambiental local y consejos prácticos para reducir la exposición a la contaminación.
El Dr. Luepker, voluntario de la American Heart Association que trabajó durante mucho tiempo en el comité científico de 2010, sugiere evitar trabajos con altas exposiciones a contaminantes y permanecer en interiores durante los episodios graves de contaminación.
“Lo principal es tener cuidado”, comentó. “Evite situaciones en las que esté expuesto a un alto nivel de contaminación del aire”.