Causas inusuales de ataque o derrame cerebral

La fibrilación auricular, el endurecimiento de las arterias y la presión arterial alta son las causas de la mayoría de los ataques o derrames cerebrales. Pero también existen causas menos comunes, en particular, los trastornos vasculares y hematológicos:

Trastornos vasculares

Trastornos no inflamatorios de los vasos sanguíneos

La displasia fibromuscular (solo inglés) es una enfermedad que no es inflamatoria y no provoca arteriosclerosis. Provoca el desarrollo celular anormal en la pared de la arteria que puede provocar rigidez, obstrucción, aneurisma o desgarro de la arteria. La DFM a menudo afecta las arterias renal (del riñón) y carótida.

Ocurre vasoespasmo en aproximadamente una cuarta parte de las personas que experimentan hemorragia subaracnoidea (un sangrado entre el cerebro y el tejido delgado que cubre el cerebro), que generalmente ocurre entre 3 y 10 días después. Es una contracción de los vasos sanguíneos y puede reducir el flujo sanguíneo al cerebro.

El término síndrome de vasoconstricción cerebral reversible describe varias afecciones que comparten un conjunto común de síntomas. Se diagnostica cuando un paciente experimenta dolores de cabeza en trueno o dolores de cabeza intensos y recurrentes, junto con resultados de pruebas que muestran al menos dos arterias en el cerebro que se contraen, pero que vuelven a la normalidad en un plazo de tres meses. Se necesitan imágenes del cerebro a través de una tomografía computarizada o imágenes de resonancia magnética para el diagnóstico.

Vasculopatía inducida por radiación puede suceder después de que un tratamiento con radiación para el cáncer acelera el desarrollo de las enfermedades relacionadas con la edad, como la arteriosclerosis.

Enfermedad de moyamoya es una enfermedad en la que las arterias carótidas se estrechan progresivamente y posiblemente se cierren, lo que da como resultado un ataque o derrame cerebral isquémico o hemorrágico.

Enfermedad de Fabry es una enfermedad hereditaria causada por la acumulación de un tipo particular de grasa en las células del cuerpo.

Trastornos inflamatorios de los vasos sanguíneos

Angeítis primaria del sistema nervioso central (APSNC) es una enfermedad inflamatoria poco común de los vasos sanguíneos que solo afecta el cerebro y la médula espinal. Los síntomas pueden incluir dolor de cabeza, convulsiones, ataques o derrames cerebrales y enfermedades cerebrales degenerativas.

La arteritis de células gigantes (ACG) provoca inflamación de las arterias. A menudo sucede en el cuero cabelludo, el cuello y los brazos. Provoca que las arterias se estrechen, lo que reduce el flujo sanguíneo.

Vasculitis cerebral relacionada con infección: Es una variedad de las enfermedades infecciosas que puede causar inflamación de los vasos sanguíneos del cerebro. Algunos ejemplos son:

  • Infecciones bacterianas, como tuberculosis y sífilis
  • Infecciones virales, por ejemplo, por el virus de Epstein-Barr
  • Infecciones por hongos, como Candida y Aspergillus

Vasculitis cerebral relacionada con neoplasia: Enfermedades de las arterias que raramente pueden complicar los tumores sistémicos. La meningitis causada por cáncer o linfoma puede afectar las arterias intracraneales pequeñas y medianas.

Trastornos hematológicos

Ataque o derrame cerebral isquémico puede estar asociado con trastornos por coágulo de sangre adquirido o heredado. Son poco comunes.

Anemia de células falciformes (ACF) (que también se llama anemia falciforme) es un trastorno genético que casi exclusivamente afecta a las personas afroamericanas o de raza negra. Provoca anomalías en la hemoglobina, la sustancia de los glóbulos rojos que transporta oxígeno a todos los órganos del cuerpo. Aproximadamente 300,000 bebés en los EE. UU. nacen con ACF, cada año. A todos los recién nacidos en los EE. UU. se les realizan análisis de sangre en el momento del nacimiento por medio de una sencilla muestra de sangre con punción en el talón.

Trastornos de coágulos y del sistema de coagulación: Estos trastornos producen coágulos de sangre en ciertas partes del cuerpo, como en las venas profundas en la pierna.

Ciertas mutaciones genéticas pueden hacer que la sangre se coagule más fácilmente. Las tendencias a la coagulación también están asociadas con los anticonceptivos orales, los trastornos inflamatorios sistémicos y las neoplasias malignas.

El síndrome antifosfolipídico (SAFL) es un trastorno autoinmunitario que puede crear coágulos de sangre.

Otros trastornos

La migraña (solo inglés) está asociada con anormalidades de las plaquetas, la coagulación y la función del revestimiento interno de los vasos sanguíneos. La migraña con aura está asociada con un mayor riesgo de ataque o derrame cerebral isquémico o hemorrágico en las mujeres, en particular si son menores de 55 años de edad. Necesitamos más investigación para recomendar formas específicas de tratar la migraña y al mismo tiempo reducir el riesgo de ataque o derrame cerebral. Sin embargo, el riesgo de ataque o derrame cerebral y la frecuencia de la migraña están asociados. Por lo tanto, los lineamientos recomiendan tratamientos que disminuyan el riesgo de ataque o derrame cerebral y la frecuencia en la que se presentan las migrañas. Dejar de fumar es muy recomendable para las mujeres con migraña o dolores de cabeza con aura.

Trombosis venosa cerebral: La TVC es una causa poco frecuente del ataque o derrame cerebral. En niños, está relacionada con infecciones (sinusitis, amigdalitis o faringitis) y requiere la administración inmediata de antibióticos. En adultos, la mayoría de los casos están relacionados con anticonceptivos, deshidratación severa, neoplasia maligna y afecciones que provocan el crecimiento anormal de células sanguíneas en la médula ósea.