Comprender su riesgo de padecer arritmia
Algunos cambios en la frecuencia y el ritmo cardíaco son normales mientras dormimos, cuando hacemos ejercicio o en momentos de estrés.
Pero, otras veces, el ritmo cardíaco irregular, o arritmia, puede ser un problema grave. Las arritmias no tratadas, como la taquicardia o la fibrilación auricular (FibA o FA), pueden tener consecuencias graves, como un paro cardíaco o accidentes cerebrovasculares.
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¿Tiene usted algún riesgo?
Entre los factores de riesgo de las arritmias se incluyen los siguientes:
Cardiopatía: Algunos tipos de cardiopatía, como la hipertensión arterial, son factores de riesgo de FibA, que es un tipo de arritmia. La fibrosis o los depósitos de tejido anormal también pueden causar bradicardia (frecuencia cardíaca lenta) o taquicardia (frecuencia cardíaca rápida) al interferir en el sistema eléctrico del corazón.
Edad: La prevalencia de las arritmias y la FibA aumenta con la edad.
Enfermedades congénitas: Algunas enfermedades congénitas pueden provocar que una persona sea propensa a sufrir arritmias. Por ejemplo, un defecto cardíaco congénito que afecta al sistema eléctrico del corazón puede provocar bradicardia. Y las personas que nacen con vías eléctricas adicionales pueden ser propensas a sufrir taquicardias.
Productos químicos: Existen diversos tipos de productos químicos que pueden provocar arritmias, algunas veces con graves consecuencias. Minerales como el potasio, el magnesio y el calcio desempeñan una función primordial en el funcionamiento normal del corazón. Pero esos mismos minerales pueden provocar arritmias si sus niveles son demasiado altos o demasiado bajos. Las sustancias adictivas, entre las que se incluye el alcohol, el tabaco y las drogas que se consumen en el entorno social, también pueden provocar arritmias. Incluso algunos medicamentos para tratar enfermedades cardíacas pueden provocar arritmias.
Otros factores: Hable con su médico para controlar otros factores que pueden provocar arritmias:
- Reducir la hipertensión arterial.
- Controlar los niveles de colesterol.
- Bajar el exceso de peso.
- Seguir una dieta sana para el corazón.
- Dejar de fumar y evitar la exposición al humo.
- Practicar ejercicio con regularidad.
- Beber alcohol con moderación.
Fibrilación auricular y sus factores de riesgo
La fibrilación auricular (FibA o FA) es un tipo de arritmia que se produce cuando una señal eléctrica anormal interfiere en la función de bombeo normal del corazón. Son diversos los factores que pueden hacer que una persona sea propensa a sufrir FibA:
- Cardiopatía subyacente
- Enfermedad pulmonar subyacente
- Ataque al corazón o insuficiencia cardíaca previos
- Cirugía cardíaca
- Hipertensión arterial
- Diabetes
- Apnea del sueño
- Tabaquismo y consumo de drogas estimulantes (como la cafeína)
- Antecedentes familiares
Los hombres y las personas mayores tienen más probabilidades de presentar FibA que las mujeres y los jóvenes.
Hable con su médico
Conozca sus factores de riesgo y hable con su médico para reducir las probabilidades de sufrir arritmias o para tratarlas si se producen.
El conocimiento es poder. Estar informado sobre las arritmias, sus peligros y riesgos puede ser una ventaja a la hora de proteger la salud del corazón.