La aorta: el pulso de la vida
Comprender la aorta y su función en la circulación
La aorta es la arteria principal que transporta la sangre desde el corazón hacia el resto del cuerpo. La sangre sale del corazón a través de la válvula aórtica. Luego pasa a través de la aorta, lo que crea una curva con forma de bastón que permite que otras arterias principales proporcionen sangre rica en oxígeno al cerebro, los músculos y otras células.
La aorta puede tener más de una pulgada de ancho en algunos lugares y cuenta con tres capas:
- Capa interior (íntima)
- Capa intermedia (media)
- Capa exterior (adventicia)
Cuando se produce un problema con la aorta, el corazón y todo el aporte de sangre del organismo puede estar en riesgo.
Cuando se producen problemas aórticos
Un aneurisma aórtico es una debilidad o hinchazón del área de la pared de la aorta.
Un problema con la aorta puede convertirse rápidamente en una emergencia médica. Los problemas graves en la aorta pueden ser:
- Aneurisma aórtico: puede producirse en el pecho (denominado aneurisma torácico) o en cualquier parte a lo largo de la aorta, como en el abdomen (aneurisma aórtico abdominal).
- Disección aórtica
¿Qué es un aneurisma aórtico?
Un aneurisma aórtico es un área debilitada o hinchada en la pared de la aorta, que puede darse en cualquier lugar a lo largo de su longitud.
Los aneurismas aórticos pueden causar dos problemas:
- Ruptura: El área debilitada o hinchada puede desarrollar un agujero, llamado ruptura, que permite que la sangre entre en el cuerpo.
- Disección: La sangre bombeada con fuerza a través de la aorta puede dividir las capas de la pared arterial, permitiendo que la acumulación de sangre se filtre en el espacio continuamente, lo cual divide más la pared arterial.
Una disección aórtica es una división entre las capas de la aorta que retiene la sangre desde el corazón. Esto puede provocar ruptura aórtica o disminución del flujo sanguíneo (isquemia) hacia los órganos.
¿Cuáles son los síntomas de una emergencia aórtica?
Algunos de los síntomas, como el dolor torácico y el dolor de la mandíbula, se asocian generalmente a un ataque cardíaco. Pero el dolor repentino en el cuello, la mandíbula, el abdomen, el pecho u el hombro, los desmayos, la dificultad para respirar y, en ocasiones, incluso una debilidad repentina también pueden ser síntomas de un evento aórtico. Porque la aorta se desplaza desde la parte superior del corazón hasta la parte inferior del ombligo, se puede presentar un dolor intenso en cualquier lugar a lo largo de este vaso sanguíneo principal. Los síntomas adicionales de una ruptura pueden ser piel fría, náuseas y vómitos o shock.
Los aneurismas y las disecciones de la aorta son emergencias médicas que ponen en riesgo la vida.
¿Cómo es un aneurisma aórtico o la disección tratada?
Las dos opciones principales de tratamiento son cirugía o medicamentos.
- La cirugía repara o sustituye la sección herida de la aorta.
- Los medicamentos disminuyen la presión arterial y reducen el riesgo de ruptura. Los medicamentos no serían una opción de tratamiento en caso de emergencia, pero pueden ser apropiados si su médico los recomienda.
Estadísticas sobre el aneurisma aórtico y la disección
Impacto: Según las estadísticas más recientes de los CDC, los aneurismas aórticos fueron la causa principal de casi 10 000 muertes en los Estados Unidos en el 2018.
Riesgo: En el 2018, alrededor del 58% de las personas que murieron por un aneurisma aórtico o disección aórtica fueron hombres.
Además de la edad avanzada y la genética o los antecedentes familiares, las personas que tienen las siguientes condiciones pueden tener un mayor riesgo de sufrir un aneurisma aórtico o una disección aórtica:
- Hipertensión arterial. El aumento de la fuerza de la sangre puede debilitar las paredes arteriales.
- Las condiciones genéticas, como el síndrome de Marfan, disminuyen la capacidad del cuerpo de generar tejido conjuntivo sano.
- Colesterol alto o ateroesclerosis. Una acumulación de placa puede causar un aumento de la inflamación en la aorta y otros vasos sanguíneos, y alrededor de estos.
- Arterias inflamadas. Ciertas enfermedades y afecciones, como la vasculitis, pueden provocar la inflamación de los vasos sanguíneos del cuerpo.
- Traumatismo, como accidentes automovilísticos.
- Tabaquismo. Las personas con antecedentes de tabaquismo constituyen el 75% de los aneurismas aórticos abdominales.
Protección: Preventive Services Task Force de EE. UU. recomienda que los hombres de entre 65 y 75 años que hayan fumado deberían realizarse una ecografía para la detección de aneurismas aórticos abdominales, incluso si no presentan síntomas.
Las personas que viven con una enfermedad aórtica u otros trastornos relacionados con el corazón pueden mejorar sus posibilidades de vivir una vida más saludable y duradera. Es importante:
- Informar de cualquier síntoma inmediatamente.
- Realizar revisiones periódicas.
- Cuide siempre su salud cardíaca.